En Málaga encontrarás una perfecta fusión entre lo histórico y lo moderno. Su oferta turística la ha convertido en importante parada de crucero, por lo que hallarás desde grandes monumentos históricos, como La Alcazaba y el Castillo de Gibralfaro, hasta hermosas playas, más de 30 museos y una deliciosa gastronomía local. La capital de la Costa del Sol te sorprenderá desde el primer momento.

Durante una escala de crucero en este puerto marroquí tienes la oportunidad de descubrir un destino que combina el estilo callejero y los paisajes marinos como pocas. Los atractivos abundan y llegar hasta ellos es sencillo. Entre los puntos más importantes destacan la Gran Mezquita, el Grand Zoco, la Medina de Tánger y la Avenida Mohamed VI.

Casablanca, la ciudad más poblada de Marruecos, ofrece una interesante mezcla de la cultura árabe y la oriental. Por eso, durante tu escala de crucero, podrás admirar importantes espacios como la Mezquita del Rey Hassan II, relajarte en la playa La Cornisa o ir de compras al Morocco Mall. Así también es imprescindible un paseo por la Medina, con sus pintorescas calles del siglo XIX. Otros lugares como el Museo Judío Marroquí y el Parque de la Liga Árabe son igual de interesantes.

El día de navegación a bordo de un crucero es ideal para experimentar nuevas experiencias, divertirse o relajarse. Buena comida, excelentes servicios y hermosos paisajes son alguna de las cosas que podrás hacer y ver. A bordo te esperan instalaciones para descansar cuerpo y mente, desde spa hasta jacuzzis, y el entretenimiento perfecto para pasar el tiempo entre escalas del crucero de la mejor manera.

Agadir

En Arrecife, la capital de Lanzarote, hallarás, sobre todo, tranquilidad y calidez. Además de recorrer el paseo marítimo y relajarte en un bar, podrás caminar por el Barrio San Ginés, admirar la Iglesia Matriz de San Ginés Obispo y sorprenderte con el Castillo de San Gabriel. Este último, junto con el Puente de las Bolas, crea un pintoresco paisaje digno de fotografiar.